BUENOS AIRES.- Una de cal y una de arena. Luego de la incómoda situación que vivieron Los Pumas en estos días, pueden estar algo más tranquilos: a Pablo Matera lo absolvió la Sanzar por no tener pruebas suficientes para sancionarlo. Había sido acusado por meterle el dedo en el ojo a uno de los Springboks, pero al no encontrar evidencias para argumentar la acusación, decidieron dejarlo libre y podrá disputar el resto del Rugby Championship junto a los de Phelan.
Quien sí está más complicado es Leonardo Senatore, acusado de morder a un jugador sudafricano. En este caso, el argentino no pudo zafar de la multa: le dieron nueve semanas de suspensión, y no podrá jugar hasta el 27 de octubre.
El tucumano Benjamín Macome será quien reemplazará a Senatore en Los Pumas.
La SANZAR -entidad que agrupa a las potencias del hemisferio Sur-convocó a ambos jugadores por infracción a la ley 10.4 (m), que se refiere a los actos que afectan el buen comportamiento del deportista y tendrán una audiencia con un oficial judicial.
La citación de Matera y Senatore se produjo tras la revisión de las imágenes del partido, ya que no fueron sancionados en el transcurso del encuentro por el árbitro neozelandés Steven Walsh.